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El sector del acero se alza como eje fundamental de la economía circular

Cortichapa economía circular acero

La transformación hacia una economía circular es una prioridad establecida por la Comisión Europea, enfatizando la necesidad de transición de los modelos económicos de un enfoque lineal (extracción, producción, uso y desecho) a uno circular. Este último promueve la prolongación de la vida de los materiales para minimizar su desuso y facilitar su reintegración en cualquier etapa del ciclo de vida de los productos.

En este contexto, el sector siderúrgico desempeña un papel crucial en la promoción de la circularidad a través de todos los ámbitos económicos. Las propiedades del acero, tales como su capacidad para ser reutilizado, reparado, reciclado, su durabilidad y resistencia, sumado a su uso extendido en una amplia gama de herramientas y maquinarias en diversos sectores, hacen que este material sea fundamental para impulsar la circularidad allí donde se emplea, gracias a su reciclabilidad y larga duración.

El sector siderúrgico también se enfoca en mejorar el uso de los recursos para la fabricación de acero de la manera más eficiente y con el menor impacto ambiental posible. Una gran parte del acero producido a nivel local proviene del reciclaje de desechos, principalmente chatarra. Cerca del 80% de las materias primas utilizadas en los hornos de fusión del sector son residuos reciclados, lo cual, en conjunto con una gestión eficiente de la energía, conduce a la producción de aceros de alta calidad para diferentes aplicaciones.

Dentro del esfuerzo continuo por optimizar sus operaciones, el sector siderúrgico está experimentando con el uso de materiales pre-reducidos obtenidos de fuentes de energía no contaminantes, con el objetivo de evaluar su impacto en el consumo de materias primas y energía.

Además, el sector administra y valora los desechos generados en sus procesos productivos. Se promueve el uso de una variedad de materias primas secundarias, derivadas de los procesos de fabricación de acero, como las escorias, cascarilla, materiales refractarios, lubricantes, y polvos siderúrgicos, entre otros. Es relevante mencionar que una gran cantidad de estos subproductos se reintegra como materias primas en los hornos del sector, y otra parte significativa se destina a otros sectores, como la construcción (para carreteras, diques, cemento), la producción de fertilizantes y muchos otros usos, demostrando así un compromiso sostenido con prácticas sostenibles.